De llorar los candidatos a la Alcaldía de Quito. Como para chumarse el día de las elecciones y olvidarse de eso que llaman ir a votar. A excepción de uno o dos el resto es como para santiguarse de rodillas.
Más candidatos que propuestas. Quito no se merece este despelote y peor esos personajes que solo ven por sus propios intereses. Si en la capital pasan estas tristes historias no me quiero imaginar en las otras provincias. De llorar.
Primero en las encuestas dicen. Primero en el corazón de los quiteños claman. Moncayo a la Alcaldía suspiran. ¿En serio es esa la mejor opción para la capital de los ecuatorianos? ¿No habrá por ahí alguien que, aunque no sea héroe de guerra sepa administrar una ciudad de la importancia de Quito? ¿El General y sus 80 años más o menos es el candidato ideal? ¿En serio? Y no es que uno tenga nada en contra de los militares, pero como diría mi santa abuela: “milico es milico así se pongan membrete de progres”. Después de ser general, héroe, alcalde repituche, diputado, candidato a presidente, ¿no será mejor dedicarse a los nietos, escribir un libro de anécdotas castrenses, sembrar un árbol de oliva? Y no es que uno tenga nada en contra de los mayores, pero ¿no será mejor que las nuevas generaciones se hagan cargo? Otra vez los mismos, cada rato como a mote. Jubílese general, de corazón le digo, de próstata le hablo.
Y peor cuando el susodicho ex militar tiene como binomio a Prefecto a un ex policía. Porque como decía mi libertina abuela: “Uy hijito, ésos siempre serán descanso-atención-firmes aunque les lean Cortázar por las noches”. Y más peor todavía o todavía más peor cuando le inscriben de Concejal a un tal Bernardo Abad, ex presentador de noticias y que como periodista es buen contador de cachos, y como edil será un buen contador de papeles cuando más. ¿En serio, no había otrito? Diosito, general, qué mal les ha hecho la capital para que se junte con esas juntas de llorar. Y de ley que en la lista ha de haber alguna ex reinita, algún ex farándula. Llenos de ex mi general, así ni como creerle ex nada.
Con el respeto que el general se merece, hoy deciden los jóvenes y se espera que ellos sueñen con propuestas novedosas, inclusivas, modernas y no con pesadillas del pasado, mucho menos con aventureros y oportunistas loromeros y similares. Jubílese general, no se puede vivir de las glorias pasadas y de los pacos perfectos. ¿Por qué se aferran tanto al poder? Usted no es imprescindible, muchos menos don Zapata y peor el Bernardo. Triángulo desquilátero imperfecto.
Sólo así de refilón, ¿cuáles son los méritos del Bernardo Abad para que sea su candidato a Concejal? ¿Dónde militó, qué proyectos alcanzó, qué libros publicó? Porque leer noticias en cualquier lindo canal cualquiera. Ah, quieren votos de los famosos, aunque sean de pocas luces. Vio general, no tienen argumentos, a lo mejor sólo argumientos a granel. El Bernardo es algo así como el Canguil pero con peinado a un lado.
Moncayo y sus aliados. A bostezar, un dos tres…
Al fin un buen artículo suyo, el general está muy mal acomopañado, quieren regresar los que formaron la burocracia de Moncayo cuando era alcalde. Primero deben responder por las acusaciones de corrupción que les han imputado. Lo peor es que los mejores no tienen chance: me refiero a Solines y Montufar.