Es octubre, todavía. Es octubre y lejos de su país natal, Milton Cervantes Suárez, es capturado en un operativo internacional que se ejecuta gracias al esfuerzo conjunto entre las fuerzas de estado panameñas y ecuatorianas y los respectivos departamentos de inteligencia de ambas naciones.
“Yo sé quién tú eres”, le dice el sargento de operaciones de inteligencia del G2 y miembro de las fuerzas de Defensa de Panamá, Pablo Quintero Reyes, al principal ideólogo y líder más representativo del movimiento subversivo ecuatoriano Alfaro Vive Carajo (AVC), al salir de la caseta de un centro de llamadas internacionales en el país centroamericano.
El 8 de enero de 1988, Carlos Santiago y Pedro Andrés Restrepo Arismendy, dos hermanos, el primero de diecisiete años y el segundo de catorce, salen de su casa ubicada en la urbanización Miravalle, en un vehículo Trooper, rumbo al norte de la ciudad de Quito, para recoger a un amigo y llevarlo hasta el aeropuerto. Santiago y Andrés nunca llegaron a su destino.
A 27 años de la ejecución extrajudicial de Ricardo Arturo Jarrín Jarrín
Rebelión
En el avión de línea, sentado entre dos personajes con caras que dan...