Como prueba del enorme apoyo cívico a los adolescentes de América Central, el dinero para liberar a Wildin Acosta fue rápidamente recaudado y enviado a la corte.
Un juez de inmigración finalmente cedió a las demandas de la comunidad y va a permitir al estudiante de secundaria Wildin Acosta salga en libertad condicional desde el centro de detención de Stewart en Lumpkin, Georgia, tras la recepción de una fianza de 10.000 dólares. Los maestros de Wildin, sus amigos y personas solidarias consiguieron recaudar la suma exigida, y esperan con impaciencia su salida de prisión de la empresa privada CCA, donde ha permanecido recluido durante los últimos ocho meses.
“Se ha demostrado una vez más que sí hay una diferencia cuando nos organizamos para detener las deportaciones. Esto significa que nosotros, como una comunidad activa, somos más fuertes que cualquier política o ley anti-inmigración”, dijo Viridiana Martínez, dirigente de AlertaMigratoriaNC, organización que encabezó la lucha para liberar a Wildin.
Wildin Acosta fue detenido como parte del dragnet del Departamento de Seguridad del Territorio Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) de este año, dirigido específicamente a las llamadas “unidades familiares”, es decir menores no acompañados y madres con hijos pequeños que, provenientes de Guatemala, Honduras y El Salvador, llegaron en el verano de 2014 al sur de la frontera con Estados Unidos en busca de asilo. Los tres países han venido sufriendo las tasas más altas de homicidio del mundo, y los muchachos y muchachas han sido particularmente vulnerables a la violencia. Wildin fue detenido mientras esperaba su autobús escolar en Durham, Carolina del Norte, la mañana del 28 de enero, en violación de las directivas DHS que pretenden evitar detenciones traumáticas de menores de edad, madres, niños pequeños y otras personas sin antecedentes penales.
El martes, 9 de agosto de 2016, la abogada de Wildin, Evelyn Smallwood, fue informada de que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés, el brazo policial de DHS) había aceptado un acuerdo para liberar Wildin a cambio de una fianza de 10,000 dólares. Como prueba del enorme apoyo cívico a los adolescentes de América Central, el dinero fue rápidamente recaudado y enviado a la corte.
El camino de Wildin para conseguir el derecho a reunirse con su familia en los Estados Unidos continúa. Cuando sea liberado de Stewart, será libre para defender su causa de petición de asilo y, si tiene éxito, obtendrá la condición de refugiado por un año. Desde allí se puede aplicar para obtener la residencia.
Fuente: https://www.opendemocracy.net/democraciaabierta/danica-jorden/10000-d-lares-para-liberar-un-adolescente-hondure-o-de-la-c-rcel-de-