Varios de los cartuchos de gas lacrimógeno que la fuerza publica empleó en Ecuador durante el Paro Nacional de octubre 2019, habían pasado la fecha de vencimiento indicada por el fabricante. Durante nuestra investigación encontramos cartuchos fabricados en 2010 y expirados en 2015, es decir con más de cuatro años de vencimiento. Para María Fernanda Poveda, abogada de la Comisión Ecuménica de Derechos Humanos, esto es un crimen. “Por algo [los cartuchos] tienen una fecha de vencimiento”, afirmó.