Las filtraciones de los Pandora Papers (2021), que se suman a los Offshore Leaks (2013) y Panama Papers (2016), prueban al mundo la forma de evasión de los poderosos, de cómo ocultan los nombres de los propietarios de las empresas, eluden las sanciones internacionales, hacen el lavado de dinero y constituyen cuentas fantasmas.