Cuando llegaron los conquistadores españoles al continente americano, murieron millones de indígenas, sobre todo, por enfermedades como la viruela, el sarampión y la influenza que se esparcieron rápidamente ante la falta de atención adecuada y las condiciones socioeconómicas de los pobladores. Hoy en día vivimos la epidemia de la covid-19 y, pese a que estamos en el siglo XXI, los paralelos con el pasado son preocupantes.
El temor a un contagio con covid-19 en las comunidades de Warints y Yawi, en el sur del Ecuador disminuyó. Ayer, el gobernador de la provincia de Morona Santiago dijo que las pruebas dieron negativo. Sin embargo quedan varias preguntas sin responder ¿Por qué no se realizó un testeo masivo del covid-19 y por qué el puesto de Salud Pública dentro de la comunidad fue abandonado durante semanas, como informa la empresa minera?
El temor a una posible infección con el nuevo coronavirus alertó también a las comunidades indígenas del Ecuador. Dirigentes hacen un llamado al Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional para que se les incluya en sus comisiones. Lo que está en juego es la sobrevivencia de pueblos y nacionalidades enteras.