12.5 C
Quito
viernes, mayo 3, 2024

1948: AL-NAKBA O LA CATÁSTROFE PALESTINA. por Pablo Kamchatka

1948: al-Nakba o la catástrofe palestina

Sobre cómo Palestina dejó de ser lo que era en escasos meses de 1948

Al-Nabka, 1948

 

La imagen de un fragmentado territorio palestino y un sólido territorio israelita tiene una historia reciente.  En 1948 ese espacio físico, que agrupa a ambos territorios, estaba poblado por 2 millones de personas, 1.4 millones de ellas eran árabes. Ese año, Inglaterra firmó la terminación de su mandato sobre el territorio palestino y se desató la catástrofe: al-Nakba.

 

Palestina a inicios de 1948

Rashid Khalidi, profesor de la Estudios Árabes en la Universidad de Columbia, describe la situación de Palestina a inicios de 1948 en su libro The Iron Cage (Oneworld Publications, 2007). La población árabe era dueña del 90% de la propiedad privada y era mayoría en 15 de los 16 distritos en que estaba divido el territorio que se extendía entre el mar Mediterráneo y el río Jordán. La mayoría de las personas llevaban su vida en el campo, sólo el 32.7% vivía en ciudades, el restante 68.3% lo hacía en zonas rurales. Sin embargo, no era una sociedad aislada.

Palestina tuvo constante intercambio con Siria, Líbano y Jordania. Fue parte del Imperio Otomano durante cuatro siglos y recibió su influencia económica y cultural. Sus ciudades recibieron creencias islámicas, cristianas y judías. Khalidi anota que había un número sorprende de periódicos y pasquines, se registraron 200 entre la Primera Guerra Mundial y 1948.  Las personas leían los periódicos en voz alta en cafeterías, casas y otros lugares de encuentro. El sector árabe de la economía crecía con ímpetu, entre 1922 y 1945 la tasa de crecimiento anual era del 6.5%, pero se evidenciaban importantes desigualdades. Existía una clase terrateniente que habían tenido altos cargos religiosos en el pasado, bajo el régimen otomano, y convivía con una emergen clase comerciante, grupos industriales y élites profesionales. Pero la inmensa mayoría de árabes eran campesinos que poseían alguna cantidad de tierra.

Esto contrastaba con la comunidad judía de Palestina que vivía principalmente en las ciudades de Jaffa/Tel Aviv, Haifa y Jerusalén. Para 1948, la población judía era de alrededor de 600.000 personas.  Aunque el movimiento Sionista había intentado que los judíos migren a Palestina con anterioridad, no fue sino con la persecución nazi que se fue concretando esa posibilidad. Se trataba además, anota Khalidi, de personas con un sorprende nivel de educación (en 1931 mientras el 86% de los judíos eran alfabetos, sólo el 22% de los árabes lo eran). Era una sociedad secular, compuesta por una clase capitalista relativamente desarrollada, sin tensiones sociales fuertes en su interior y que contaba con instituciones para-estatales que la organizaban a través del poderoso movimiento Sionista. Si bien las olas migratorias llegaron de distintos lugares de Europa y el hebrero no era para muchos su lengua materna (la mayoría lo aprendió al llegar a Palestina) tenían un proyecto ideológico bastante homogéneo:  crear una sociedad judía en Palestina.

Un punto decisivo para entender el panorama de 1948 es el distinto nivel de apoyo que recibieron ambas partes. La población judía que llegó antes de 1948, llamada yishuv, recibió importante apoyo de la Liga de Naciones e Inglaterra para los procesos de migración masiva. Después de la Segunda Guerra Mundial, contó con el apoyo militar de Estados Unidos y la Unión Soviética, y el significativo envío de dinero por parte de la comunidad judía estadounidense. Mientras que por el otro lado ninguno de los países árabes podía dar apoyo efectivo a Palestina porque estaban bajo regímenes coloniales u ocupaciones extranjera, como en los casos de Egipto, Iraq, Jordania, Siria y Líbano.

Este este panorama, analiza Khalidi, si bien la población árabe si tenía una consciencia nacional en términos modernos -construida en lucha contra la potencia inglesa-, no contaba como los judíos con los “altos estándares de cohesión política y organización política avanzada exhibidos por el movimiento Sionista” (traducción libre). Añadiría, de mi parte, que la población judía –a diferencia de palestina- contaba con la confianza de las potencias mundiales y el conocimiento necesario para armar un estado y organizar su fuerza represiva.

Jerusalén: vista desde el Monte de los Olivos, 1910.
Jerusalén: vista desde el Monte de los Olivos, 1910.

Al-Nakba  (la catástrofe)

La ONU diseñó en 1947 un plan para repartir el territorio palestino que estaba bajo mandato inglés, ahí estableció que el 55% sería destinado para el estado de Israel. Al siguiente año, en 1948, se inició una guerra que duró desde marzo a octubre provocando una profunda transformación de lo que aquí se ha descrito. De 1.4 millones de árabes, alrededor de 750.000 de ellos fueron expulsados u obligados a salir del área que se había destinado para el estado de Israel. De hecho, Israel fue más allá del plan de repartición, y a través de la guerra ocupó del 78% del  territorio palestino. Alrededor de 150.000 palestinos quedaron dentro de los límites del nuevo estado de Israel, convirtiéndose en una pequeña minoría ante la migración a gran escala que se produjo en 1948. Los demás palestinos fueron refugiados en el resto de Palestina (el 22% del territorio), Líbano y Siria.

Las milicias israelís tomaron el control de las ciudades de mayor población árabe, entre las que destacan Jaffa y Haiba, en la primavera de 1948. Al tomar control de estas ciudades despojaron de su propiedad y transformaron en refugiados a la población árabe culturalmente más activa, de mayor riqueza y educación, destaca Khalidi. También en el oeste de Jerusalén fueron obligados a huir 30.000 personas árabes. La toma de las zonas rurales se realizó en los siguientes meses, allí vivía la mayoría de la población palestina.

Dentro de los límites del nuevo estado de Israel existían alrededor de 5.000 asentamientos poblados árabes rurales . Cerca de 4000 fueron conquistados por milicias sionistas o por el ejército israelí a finales de 1948. Sus pobladores fueron obligados a huir, prohibidos de retornar y su tierra fue confiscada. Muchos de los poblados vacíos fueron destruidos. Sin embargo, 120.000 palestinos quedaron dentro del área rural de Israel, así como decenas de miles de beduinos, ambos fueron sometidos a ley marcial durante cerca de 20 años.

La reducción territorial, la reducción del espíritu de una sociedad en su conjunto y el dolor que significó la salida de los refugiados, es recordado en la memoria palestina como al Nakba, la catástrofe.  El genocidio que hoy -22 de julio- tiene lugar en Palestina, se justifica en base a varios olvidos, uno de ellos es el de la catástrofe.

Rashid Khalidi, The Iron Cage, The Story of the Palestinian Struggle for Statehood. Oneworld Publications, England, 2007.

 

fuente: www.andamiosjuridicos.wordpress.com

lalineadefuego
lalineadefuego
PENSAMIENTO CRÍTICO
- Advertisement -spot_img

Más artículos

Deja un comentario

- Advertisement -spot_img

Lo más reciente