Quito, 4 de mayo, 2013
Querido Alberto:
Lamentablemente tengo que hacer referencia al documento “El papel estratégico del personal académico en la transformación superior del Ecuador”, el que, a falta de argumentos frente a mi contundente cuestionamiento al giro que está tomando la política universitaria del Gobierno, se desvía hacia ataques personales. Uno de ellos tiene que ver con el hecho de haber apoyado “abiertamente” tu candidatura en las últimas elecciones. En un ambiente gubernamental donde el comportamiento tiende a ser cada vez mássolapado, entiendo que una actitud frontal y abierta, como son todos mis actos, haya sorprendido a los autores del documento. Esta por demás reiterarte aquí mi admiración a tu honestidad y a tu compromiso de lucha permanente por nobles ideales que los comparto a plenitud. Siempre estaré altamente honrado de tu amistad.
He leído muy rápidamente el mencionado documento cuyo estilo y contenido reflejan una similitud asombrosa con el estilo y contenido del Reglamento de Escalafón del Docente Investigador, redactado, como lo expreso en mi artículo, con la minuciosidad de un burócrata y la vocación de un gendarme. Con esto, por lo menos queda claro la autoría de dicho Reglamento.
Lo que sí me parece casi ofensivo es que se nos quiera dar una lección de Historia de la Universidad Ecuatoriana. Aquí cabe perfectamente la expresión de un distinguido rector de una prestigiosa universidad del país: “pichones de escaso plumaje y consultores internacionales nos quieren enseñar cómo y hasta donde debemos volar”. Será esto también parte del neo-colonialismo académico al que hago referencia en mi artículo ¿Hacia dónde va el Proyecto Universitario de la Revolución Ciudadana?
Resulta muy revelador el titulo mismo del documento en referencia: “El papel estratégico del personal académico en la transformación de la educación superior en Ecuador”. Y es que resulta difícil no asociar este título con aquella publicidad que promociona esos temas de moda en el mundo empresarial y de negocios bajo títulos como: el papel estratégico del personal en la empresa, el papel estratégico del personal en el mundo de los negocios, … y así por el estilo. Esto corrobora plenamente una de las preocupaciones expresadas en mi artículo a propósito de la reglamentación y estandarización de la docencia universitaria. Al equiparar el profesorado universitario como una simple categoría de gremio profesional o de burocracia de institución pública (muy respetables, por cierto), son las categorías de productividad, eficiencia y logro competitivo, no la erudición o la inteligencia, los valores bajo los cuales se pretende guiar el mundo académico. Señalo en mi artículo: “Así, en un viraje irónico, los docentes que se consideran ellos mismos como intelectuales autónomos, encuentran que su trabajo, debido a la constante evaluación y dirigismo, tiende a la conformidad y a la estandarización. Como sutilmente lo anota un académico norteamericano, el profesor universitario no se extinguirá per se, él será absorbido en categorías más amplias de profesionales y servidores públicos.
En cumplimiento con el Mandato Constituyente 14 tuve el privilegio de elaborar el Informe de Evaluación de las Instituciones de Educación Superior ordenado por la Asamblea Constituyente bajo tu histórica conducción y que dio inicio al proceso de cambio de la universidad ecuatoriana. Entiendo la inmensa frustración que debes haber sentido cuando todo el proyecto de transformación política y social que tú forjaste se bifurcó hacia trayectorias dignas de mejor suerte. Guardando las distancias, esa misma frustración es la que siento frente al giro que está tomando el cambio de la educación superior en el país; cambio por el cual me comprometí y por el cual aun tengo que enfrentar oscuras retaliaciones.
Ahora, más que nunca, cabe tu reflexión: la tarea no ha concluido. Recién empieza. Realmente siempre estará empezando …
Un fraternal abrazo,
Arturo Villavicencio
Arturo: un saludo y adelante, tres son multitud. Lucharemos con la inteligencia, que es el arma que tenemos. No podrán quitarnos la razón. Hágame llegar su dirección electrónica. Aquí la mía: modesjor@yahoo.com
Muchas gracias Arturo por su comentario. Como cientifica ecuatoriana residente en el exterior, la idea de una ciencia burocratizada es inimaginable. Espero que la reforma a la educacion superior tenga un giro en la direccion correcta.