ECUADOR INICIA EL PROCESO PARLAMENTARIO HACIA UNA NUEVA LEY DE TIERRAS
Por: Francisco Hidalgo F.
El miércoles 9 de mayo se abrió el tratamiento parlamentario hacia una nueva Ley de Tierras y Territorios en el Ecuador, ese día la Comisión de Soberanía Alimentaria de la Asamblea Nacional asumió el proceso de debate y elaboración de la propuesta de ley que luego deberá ser conocida por el pleno de la Asamblea (en el Ecuador la función legislativa es unicameral) en primer debate.
El hecho de por si es importante, a ello hay que añadir que este reconocimiento legislativo es una consecuencia de las recientes movilizaciones de las organizaciones campesinas e indígenas: tanto desde el lado de la Red Agraria, que en Octubre del 2011 arrancó con una campaña de recolección de firmas, llamada la “ruta por la tierra”, para reunir cuarenta mil adhesiones ciudadanas y acogerse al recurso constitucional de iniciativa popular legislativa, que fueron presentadas en un mitin el 20 de marzo; como del lado de la marcha por el agua y la vida que desarrolló la CONAIE (confederación de nacionalidades indígenas del Ecuador) entre el 8 y 22 de marzo desde la provincia amazónica de Zamora, hasta la ciudad de Quito, que concluyó con una presentación de demandas al presidente de la Asamblea Nacional.
De esta manera al debate parlamentario ingresan cinco propuestas de ley, la prioridad corresponde a aquella presentada por las organizaciones campesinas e indígenas de Red Agraria, entre las cuales destacan FENOCIN (organizaciones campesinas, indígenas y negras del Ecuador) y CNC – Eloy Alfaro (coordinadora nacional campesina), con el respaldo de cuarenta mil firmas , cuyo texto corresponde, a su vez, a la propuesta de ley de tierras construida por la Conferencia de Soberanía Alimentaria, en un proceso de talleres y acuerdos multilaterales que arrancó en agosto del 2010.
Sera la primera vez en este periodo legislativo que se trate una ley asumiendo los derechos que corresponden al rango de iniciativa popular legislativa, lo cual implica que se reconozca a las organizaciones sociales responsables el derecho a su presencia directa en los debates de la respectiva comisión legislativa y el pleno de la Asamblea Nacional, además de que considerar un límite para su tratamiento (180 días) y queda a salvo de un veto total desde el Ejecutivo.
Las otras cuatro propuestas de ley provienen de legisladores de diversas bancadas parlamentarias.
Estamos frente al tratamiento de la cuestión de la tierra dentro de un marco social y político posneoliberal, que se desenvuelve con la tensión entre una tendencia que prioriza el lado de un modelo de modernización desde el estado, que cuya principal expresión esta en el Ejecutivo, y otra tendencia que denuncia un modelo extractivista y apela por derechos a la equidad y la plurinacionalidad, cuya principal expresión está en los movimientos indígenas.
¿Cuáles deberían ser los ejes fundamentales de la nueva ley de tierras?, ellos están señalados teóricamente en el texto de la carta constitucional del 2008, que en sus artículos 281 y 282, cuando trata del régimen de desarrollo propone mirar lo rural y agrario desde una perspectiva de soberanía alimentaria .
En rigor la constitución establece un marco redistributivo, con el objetivo de garantizar un acceso equitativo a la tierra para los/as campesinos/as e indígenas con poca tierra o sin ella, y los derechos de los pueblos indígenas y las mujeres en el campo, enfrentar (“prohibir”) las dinámicas que reproducen la concentración de la tierra y la pervivencia del latifundio, garantizar que la propiedad sobre la tierra cumpla con funciones sociales y ambientales, estableciendo el mecanismo de fondo de tierras para su implementación.
Pero también acontecimientos recientes, como la reacción negativa de los portavoces de los grandes propietarios de la tierra, en agosto del 2010, ante cualquier propuesta de límite máximo sobre la tenencia de la tierra, para no hablar de la oposición franca a una política redistributiva, mas la ofensiva económica y gubernamental a favor de las inversiones empresariales para la expansión de cultivos orientados a agrocombustibles y el poder de grupos agroexportadores que pugnan fuertemente por la renovación de negociaciones hacia un acuerdo comercial con la Unión Europea, plantean un escenario de debate y correlación de fuerzas muy complejas.
Cabe tomar nota que estamos ante un inminente escenario electoral, la primera vuelta presidencial será en Febrero del 2013, que tiende a tensar las posiciones sociales y políticas.
El debate parlamentario abre un escenario importante y complejo para la discusión sobre políticas públicas sobre la tierra, en los próximos meses, los desafíos son fuertes: i) avanzar en un camino que garantice un debate democrático, en los contenidos pero también en las formas, con participación real de los movimientos campesinos e indígenas; ii) articular el debate sobre la tierra con un modelo de agricultura de soberanía alimentaria, incluyente, equitativo; iii) asumir con consecuencia los postulados que sobre este tema plantean tanto la Constitución, como la Ley Orgánica de Soberanía Alimentaria, e incluso el propio plan nacional de desarrollo.