FCME: Gente sencilla haciendo cosas grandes
Periódico Opción <www.nodo50.org/opcion>
08 agosto 2014
El informe para primer debate de la Ley Reformatoria de la Seguridad Social, resultado de varios cambios al proyecto de Ley de Cesantía Adicional del Magisterio, que inicialmente presentara el asambleísta Holguer Chávez, de Alianza País, por más de 3 ocasiones, será tratado por el Pleno del legislativo para aprobarlo antes del 15 de agosto.
El proyecto de Chávez, desechado en varias ocasiones por los mismos asambleístas oficialistas por inconstitucional, ahora toma cuerpo, puespropone que todos los Fondos Provisionales que hayan recibido dineros del Estado pasen a ser administrados por el IESS, a través de su entidad bancaria, el BIESS, por lo cual estarían en la mira 54 de los 64 fondos previsionales existentes en el país.
El proyecto es calificado como un “atentado” a los fondos privados de los trabajadores del Magisterio, petrolero, y de otras instituciones públicas, según el análisis del directorio del Fondo de Cesantía del Magisterio Ecuatoriano (FCME), ya que “es un proyecto inconstitucional, ilegal, que realiza una exposición de motivos con hechos y argumentos falsos, que incurre en falsedad ideológica, contrarios a la verdad y a la realidad jurídica vigente”, manifiesta Juan José Castelló, presidente nacional del FCME.
Para Castelló, esta Ley reformatoria a la Ley de Seguridad Social “es una recopilación de remiendos y altera la esencia, la naturaleza y los beneficios de la entidad, a pesar que la Constitución y las leyes vigentes la protegen”.
Dos momentos fundamentales:
- Creación
El FCME fue creado por la voluntad y la acción del Magisterio en el año 1991, con el objetivo de conseguir una cesantía complementaria a la del IESS, por las bajas pensiones que el Estado entrega a sus jubilados; concebida y administrada de manera muy diferente a la Cesantía General del IESS, utilizando las leyes vigentes, con fondos inicialmente registrados en el Ministerio de Bienestar Social y desde el 2005 registrados y controlados por la Superintendencia de Bancos y Seguros, quienes han auditado el manejo tanto financiero como administrativo continuamente, no han encontrado falencias o malos manejos en toda su vida institucional.
“Esta iniciativa –dice Castelló- permitió “blindar” al FCME-fcpc, definiendo las siguientes características fundamentales: VOLUNTARIEDAD, libremente el maestro decidía si se afiliaba o no; CUENTAS INDIVIDUALES, cada uno debía saber cuánto aportaba mensualmente y cuánto ganaba su capital acumulado por intereses; SOLIDARIO, cada uno recibía una tasa de interés preferencial sin importar el saldo de su Cuenta Individual; COMPLEMENTARIO AL IESS, es una Cesantía complementaria a la Cesantía General y a la Cesantía Adicional del Magisterio; PROPIEDAD DE LOS AFILIADOS: el capital acumulado, individual y colectivo, son exclusivamente los aportes de cada afiliado y sus rendimientos, sin que haya en estos 23 años un aporte del Ministerio de Educación”.
Como producto de la participación democrática se designa la directiva provincial mediante convenciones locales; delegados que deben elegir al Directorio Nacional.Siendo la rendición de cuentas continua y la entrega de información de las cuentas individuales parte de sus fortalezas.
De 1991 al año 2001 se contrata al Filanbanco, entonces el banco más grande, para que mediante un Fideicomiso administre los recursos de los maestros, y se le dispuso llevar Cuentas Individuales. Con la posterior quiebra del banco y el congelamiento bancario a nivel nacional las actividades financieras se paralizaron, por lo que se hicieron los trámites respectivos para la devolución de los fondos de los maestros.
Desde septiembre del año 2001 inició la administración propia, profesional y eficiente, con los 15`136.606,37 de dólares recibidos por los 10 años de administración del Filanbanco en las cuentas individuales. En octubre del 2001 la VIII Convención Nacional Extraordinaria del FCME resolvió por unanimidad asumir la administración de esta entidad por parte de los mismos maestros, crear las instancias operativas propias y contratar los recursos técnicos, que permitan garantizar el normal funcionamiento el FCME, lo que determinó la supervivencia y consolidación del FCME, y descubrió fortalezas no conocidas, que profundizaron en los afiliados el concepto de propiedad del FCME. Han pasado 13 años y hoy el FCME-fcpc tiene 431 millones de dólares, que son administrados por los propios afiliados en beneficio de los afiliados.
- La dolarizaciòn y el beneficio delos maestros
Otro hito, dice Castelló, ocurrió el 28 de octubre de 1998, cuando el directorio del FCME tomó la decisión, ante la devaluación constante del sucre frente al dólar y para preservar el valor real de los ahorros de sus afiliados, de convertir el 80% del valor total del fondo a dólares, a la cotización del Banco Central de 6.732 sucres por dólar. Esta decisión protegió los ahorros del FCME cuando el 20 de enero del 2000 se dolarizó la economía ecuatoriana a $25.000 sucres por cada dólar.
El control de la eficiencia
El 8 de abril de 2005, la Superintendencia de Bancos y Seguros, al amparo de la Resolución No. SBS-2004-740, aprueba los Estatutos y se registra al Fondo de Cesantía del Magisterio Ecuatoriano, FCME-fcpc, el primero de los 91 fondos de cesantía y jubilación existentes.
El 24 de febrero de 2010 la empresa Internacional BureauVeritas entregó a la Matriz la Certificación ISO 9001, por la calidad y eficiencia de la administración que hasta hoy permanece. En el 2008 ha sido ratificada luego de las respectivas auditorías.
Las inversiones en busca de más beneficios han sido aciertos. La Central Hidroeléctrica Sabanilla, que generará energía limpia, es una inversión privada, y entrega condiciones preferenciales, otorga certeza y seguridad jurídica y permite una planificación financiera a largo plazo con endeudamiento planificado y rentabilidad segura. La inversión total es de 62’4 millones de dólares, de los cuales los accionistas aportan 18 millones de dólares y 44’,4 millones de dólares estan apalancados a través de Títulos Valores.
El aporte estatal, una mentira.
En el 2005, más de ochenta mil servidores del sistema educativo fiscal que tenían Cesantía Adicional del Magisterio (CAM) que estaba siendo administrada por el IESS, se pronunciaron favorablemente en un 84% en la Consulta Nacional, convocada por el Ministerio de Educación y Cultura, a favor de que se transfiera dicha cesantía al FCME fcpc. Proceso que fue autorizado por la Superintendencia de Bancos y Seguros, y por el que se consiguió que el IESS devuelva al FCME $60´850.737.89 de los aportes de la Cesantía Adicional administrada por el IESS por 45 años y por lo que el IESS también cobró; un trámite que duró 3 años, pues el IESS no tenía la base de datos actualizada por lo que nunca los servidores del magisterio recibieron del dinero ahorrado. Por lo tanto no son recursos del Estado, sino recursos voluntariamente aportados or los maestros, aseguran ex directivos del FCME.
Según las versiones del directorio del FCME, el asambleísta Chávez no toma en cuenta que los fondos privados tienen un organismo de control que es la Superintendencia de Bancos y Seguros, organismo que también controla a los administradores públicos de la seguridad social, lo que considera es una ligereza o torpeza jurídica de parte del legislador.
La ley que está en tratamiento viola el principio de libre asociación, reconocido en la actual Constitución en los artículos 326 numeral 7, 66 numeral 15, que señalan que se garantizará el derecho y la libertad de organización de las personas trabajadoras, sin autorización previa.
Las normas vigentes también reconocen el derecho a desarrollar actividades económicas, en forma individual o colectiva, conforme a los principios de solidaridad, responsabilidad social y ambiental, también está el principio de irrenunciabilidad e intangibilidad de los derechos de los trabajadores, y la nulidad de toda estipulación contraria, lo que ratifica la ilegalidad de la propuesta oficialista.
Castelló concluye que esta ley reformatoria es confiscatoria, viola los más elementales derechos constitucionales de la propiedad privada, ya que los recursos previsionales que administra el FCME-fcpc son de propiedad de cada uno de los miles de maestros que han aportado por años, ya que el BIESS no tiene facultad constitucional para manejar fondos privados.
Al pasar a manos del BIES, como pretende el proyecto de ley, el ahorro privado de los maestros, 431 millones de dólares, no tendría, representación especial, por lo que ellos dejan de tener voz y voto, pasan a ser una cuenta contable y nada más, dejan de ser dueños y pasan a ser solo clientes.
Así mismo, los bienes y demás activos del FCME pasarían al BIESS (terrenos adquiridos para construir Ciudadelas del Magisterio en Cuenca, Esmeraldas, Guayaquil, Riobamba, Imbabura, Manabí, Loja, entre otras). En fin por todas estas razones los maestros manifiestan que este Proyecto de Ley debe ser negado y archivado.
Los maestros y demás trabajadores afectados por esta ley reformatoria han manifestado su malestar por su contenido, por lo que se prevé asambleas nacionales y movilizaciones, pues no permitirán que sus ahorros sean incautados por el gobierno.
LAS CIFRAS: