La decisión unilateral de Estados Unidos contra Venezuela, asumiendo a ese país hermano como una amenaza para su seguridad nacional, anuncia una futura intervención armada contra Venezuela.
Si fuera en otro momento histórico, directamente invadirían el país y destituirían al gobierno como en tantas ocasiones.
Sin embargo, la intervención armada en la actualidad puede ser de otro tipo, por ejemplo: hacer un bloqueo naval a Venezuela con barcos estadounidenses y no permitir la salida de petróleo venezolano.
Una acción como esa durante algunos meses, fortalecería el golpe económico que se ha venido intentando y, complementada con las acciones directas opositoras en lo interno y sectores paramilitares desde Colombia, podría provocar una guerra civil. Así, se tendría luego la excusa para invadir.
La UNASUR (Unión de Naciones Suramericanas) además de pronunciarse con comunicados rechazando este ataque a la soberanía suramericana y latinoamericana, debería asumir una postura directa de denuncia conjunta por parte del Secretario General y los cancilleres en todos los organismos multilaterales.
Este momento histórico necesita una reacción conjunta urgente. El Secretario General de UNASUR y una comisión de cancilleres deberían trasladarse a Naciones Unidas, la OEA (Organización de Estados Americanos), Unión Europea, Unión Africana, parlamentos regionales y algunos países para denunciar este ataque y alertar sobre la posible intervención armada a futuro.
Algunos podrán decir que esto es imposible. De la misma forma que se preparó el terreno para intervenir y provocar las guerras civiles en Libia y Siria, se está preparando el terreno para una intervención en Venezuela.
El futuro demostrará que, si no se toman medidas urgentes conjuntas ahora, posiblemente haya que lamentar una intervención y guerra civil.
Los partidos políticos y movimientos sociales que han defendido y defienden la soberanía latinoamericana, más allá de las posturas políticas domésticas en sus países, deberían hacer un frente común contra la intervención de Estados Unidos en Venezuela.
El presidente Rafael Correa que ha sido solidario con Venezuela, de la misma forma que ese país hermano lo ha sido con Ecuador, debería convocar ya un acto público de rechazo a la intervención estadounidense en Venezuela y América del Sur.
El querido Pepe Mujica, que ahora no está en la presidencia, pero sigue siendo una Voz de la América Latina, debería liderar junto a otros sectores un acto y vocería de rechazo a una intervención.
El Secretario General de la decadente OEA y quien aspira a ese cargo deberían pronunciarse ya contra la intervención.
Los presidentes progresistas y democráticos deberían analizar no participar en la próximo Cumbre de las Américas en rechazo a estas acciones unilaterales de Estados Unidos.
El bloque a Cuba no se termina y ya se está iniciando un nuevo bloqueo a otro país latinoamericano. Todos debemos pronunciarnos contra este ataque a la soberanía de América Latina y el Caribe.
Fuente: http://kintto.blogspot.com/2015/03/estados-unidos-prepara-bloqueo-naval.html
Como el periodista no puede demostrar nada, que lo haga “el futuro”. Qué belleza.
El autoritarismo;la corrupción;laincapacidad para administrar y el despilfarro de los recursos económicos básicamente petroleros que pertenecen a todo el pueblo venezolano por parte del gobierno de Chávez y Maduro producen el mayoritario rechazo de su propia gente y a su vez el repudio de la comunidad internacional y posiblememente se produzca una intervención militar por parte de los Estados Unidos al ver amenazados sus intereses .El rotundo fracaso del modelo de gobierno venezolano que se autodenomina “socialismo del siglo 21” producirá la confluencia de muchos elementos y factores que producirán a muy corto plazo el cambio de gobierno en ese país hermano