LA REVOLUCION CIUDADANA ¿LIBERAL?
Tomas Rodríguez León
“ La verdad, es como la hoja de una espada sin empuñadura, corta por todos lados a quien quiera sostenerla, y más a quien quiera forcejear con ella.”
“Toda memoria es subversiva, porque es diferente, y también todo proyecto de futuro.” Eduardo Galeano
A confesión de parte relevo de prueba. En el último periodo, toda la propaganda oficial se ha dirigido a la recuperación de la memoria histórica de Alfaro y del pensamiento liberal. Felices deben estar los nostálgicos de AVC al ver que oficialmente se cumplen sus sueños de una patria alfarista.
Cuando en la década de los años ochenta muchos camaradas del MIR se aprestaban a marchar a filas del AVC uno de los debates candentes se centraba entre el alfarismo y el marxismo como concepciones revolucionarias. Los pro alfaristas decían que había que recuperar (entre otras recuperaciones) a Alfaro como lo habían hecho los centroamericanos con Sandino y Farabundo Martí. Los militantes marxistas señalamos entonces que a diferencia de los centro americanos, Alfaro representó los intereses revolucionarios de la burguesía agro exportadora y la banca costeña, siendo en su forma una revolución popular pero en su contenido una revolución burguesa.
En la revisión histórica, liberales y conservadores no siempre representaron opciones entre el progreso y el atraso. El mismo Eduardo Galeano señala que uno de los factores de la derrota del Paraguay progresista y “conservador” fue el liberalismo porteño de la santa alianza que hizo sucumbir la entonces tierra más progresista de las Américas. En el Ecuador debe recordarse que más allá de su carácter religioso y tiránico fue el gobierno “conservador” de García Moreno quien impulso cambios significativos en la sociedad ecuatoriana; La politécnica Nacional, el observatorio, el ferrocarril e incluso sistemas de salarizacion de los indios que afectaban la estructura cuasi feudal, fueron obras garcianas
Hoy de manera idealizada los liberales de siempre, llevan a Eloy Alfaro a una condición de revolucionario pleno, autentico y eterno de manera tal que arbitrariamente y no haciendo justica objetiva, separan a Alfaro de su entorno de clase y del contexto de socioeconómico que lo rodeaba. Quienes necesitaban un gobierno liberal y quienes financiaron su gesta, fueron personajes de la burguesía agro exportadora costeña y del capital financiero incipiente
La transformación burguesa era una necesidad internacional no solo en Ecuador, la misma expresaba las necesidades de expansión mercantil capitalista que en búsqueda de aliados menores para la metrópolis convocaba a proveedores de materias primas en un nuevo esquema explotación neocolonial. El movimiento alfarista es resultado de un proceso histórico de la nueva geopolítica hemisférica republicana, insertada en el pensamiento liberal continental. Deben reconocerlo los apologistas es también el movimiento de apertura y reacomodo en nuevas relaciones de dependencia
Los grandes comerciantes importadores y exportadores de Guayaquil fueron la base de la revolución liberal alfarista. La necesidad de modernizar al aparato estatal entrampado en los esquemas semifeudales era una imperiosa urgencia de quienes consideraban el desarrollo agro exportador como la mejor opción. La expresión política del Alfaro tiene un buen antecedente en el pensamiento de Montalvo, como también en el carácter retardatario de la derecha conservadora de extremos medievales, de por si, provocadores de una semántica de repuesta radical y liberal.
La Connotación libertaria entonces, era también una justa reivindicación de quienes necesitando la libertad económica se comprometían contra los esquemas asfixiantes de la dominación ideológica, espiritual y moral del terrorismo gamonal eclesiástico. Guayaquil se constituye en el referente ideológico de la libertad liberal y Quito y Cuenca del atraso conservador.
Como toda revolución burguesa, la revolución alfarista tiene sus componentes de forma y esencia que no tan solo la caracterizan sino que marcan su destino. Al ser una revolución apuntalada en reivindicaciones ancestrales de sectores populares coexistiendo con el discurso liberal-económico de quienes la financiaron, la bifurcación de la misma, era un resultado esperado. Los actores de las corrientes polarizadas del liberalismo son Alfaro y Plaza en el terreno político formal, aunque en la realidad Alfaro juega una posición centrista. Cabe recordar que el ala izquierda y mejor informada, estaba constituida por José Peralta y Roberto Andrade quienes ya advertían a Alfaro de la suerte que correría por su alianza con los sectores pudientes. El ala izquierda será en el devenir la primera aproximación al pensamiento socialista.
Alfaro muere en su ley como revolucionario descontextualizado y traicionado, muere también sin abrazar ni sostener un programa clasista (ya posible de campesinos y obreros ) muere exento de apoyo de la base social que lo acompaño. Así, huérfano de apoyo popular, con una concepción del poder con proyecciones individualistas, cae como mártir de los Tirios y Troyanos de nuestra historia.
Sobre la muerte misma de Alfaro, los hechos indican que sus seguidores se habían reducido, no si no, se explica el asesinato de Montero y la poca reacción en Guayaquil. La larga cruzada al martirio sin que nadie, sin que ningún pueblo se alce en su defensa camino a la muerte. Tampoco se puede soslayar que el pueblo de Quito estuvo más presto a acceder al pedido de la iglesia conservadora y de de los privilegiados que a los silenciosos enunciados de los ausentes, antes servidores de su poder.
Los pueblos tienen historia y mejor memoria hasta cuando no la deben; recordemos que los forajidos en búsqueda de Lucio Gutiérrez gritaban “hay que arrástralo como a Alfaro”. No se hable ahora de la inocencia inmaculado de los pueblos, los pueblos tienen sus imaginarios cómplices y cuando no están orientados por la conciencia histórica sucumben al manejo de la ideología dominante. La Alemania nazi es otro ejemplo que nos recuerda a Marx con su enunciado: “la ideología de toda la sociedad es la ideología de la clase que domina” La alfarada no altero tampoco el campo ideológico del poder
SOBRE ALFARO
Enrique Ayala Mora entrevista DIARIO EL COMERCIO
“Cuando se produjo la revolución y los grandes oligarcas guayaquileños y los intelectuales liberales buscaron un líder, no pudieron encontrarlo en sus filas y tuvieron que acudir a este líder popular que ya tenía un gran arraigo, sobre todo en las masas costeñas”
Patricio Ycaza en “La Historia del movimiento obrero ecuatoriano”
“Alfaro dejó intocados los intereses económicos de la clase terrateniente
Agustín Cueva En “El Proceso de dominación política”:
“la revolución liberal…pese a no haber transformado sustancialmente la infraestructura económica del Estado”… “no tocó el régimen de la propiedad agrícola privada”…”aceleró la democratización política y cultural del país, mas no en igual medida su democratización económica”.
Cueva “Entre la ira y la esperanza”
“La Revolución liberal…consistió en la toma del poder político por la burguesía alta y media”,
Benites Vinueza en “Drama y Paradoja”
Alfaro fue la materialización del capitalismo bancario naciente, de la economía de exportación de la zona litoral, de la política burguesa recién nacida…”;
Patricio Martínez “Las Raíces del Conflicto”
“La gesta liberal no va a significar una transformación sustancial de la estructura económica y social del Ecuador…si va a transferir el control del Estado a la burguesía costeña…consolidó a la burguesía y mantuvo, o, aún más, desarrolló la estructura económico-social de dominación y explotación”, resaltando el hecho de que el nuevo grupo dominante nacido de la Revolución fue “la burguesía comercial costeña, agroexportadora y complementariamente bancaria.
José Peralta en “ yo José Peralta”
El Presidente Alfaro me llamó a colaborar en su gobierno para tratar de lograr la consolidación en el Poder del Partido Liberal; me hizo recapacitar en la importancia táctica que tenía el no acelerar las reformas, porque un exceso de ellas traería el fortalecimiento de los grupos conservadores y echaría por tierra los logros alcanzados
Rodolfo Pérez Pimentel “Dicionario biográfico del Ecuador”
“Para el triunfo de la revolución Alfarista en Enero de 1.906 sonó insistentemente su nombre (Roberto Andrade) para ocupar uno de los ministerios, pero Alfaro no le designó porque creyó prudente no mortificar a los conservadores”
PRIMERA PARTE:
Ha llegado la hora de la Resistencia Nacional
La clase trabajadora, la pequeño burguesía empresarial-productiva, los estudiantes, grupos femeninos y demás sectores políticos organizados de la sociedad ecuatoriana, que confían en este proceso de cambio liderado por Rafael Correa, deben conformar los verdaderos Comités de Resistencia Nacional (CORENA), para frenar los ataques provenientes de los grupos opositores y de los medios fácticos
Escribe:
Cristóbal Rodríguez G.
Ced. 0400620894
Esmeraldas, 17 de febrero de 2012.- Los casos El Universo y Monumento a León Febres Cordero; la Ley de Comunicación que se tramita en la Asamblea Nacional y los Derechos Humanos y Civiles que buscan ser conculcados por “Los cabreados”; la política internacional manejada por el país en torno a las Islas Malvinas; la Cumbre de la Américas a realizarse en Bogotá-Colombia y la participación de Cuba en este foro continental, entre los más visibles, se han convertido en la punta de lanza y en la bandera de lucha de la oposición, que coincidencialmente pertenecen a la clase dominante, a sectores subjetivizados que carecen de escuela política y a la mal llamada izquierda (MPD y Pachakutik), que no son sino “la derecha que aún no toma el poder” (1)
A estos temas, se une otro y no menos delicado como es el “Plan Revancha” que a decir del presidente de la República de Ecuador, Rafael Correa Delgado, es promovido por gente vinculada a la política y a las Fuerzas Armadas tanto en servicio pasivo como activo.
Quienes estamos vinculados a los medios de comunicación y hemos “vivido en su interior” durante largos años; y, más allá del “espíritu de cuerpo”, que sí se maneja en medios castrenses no así en las empresas privadas donde se practica el sálvese quien pueda, nos da mucha nostalgia ver como nuestros colegas del Diario El Universo se encuentran anímica y económicamente minimizados, no sólo por consecuencia del juicio que por injurias le sigue a sus propietarios y un ex editorialista, sino por la misma práctica capitalista: la oferta y la demanda.
Pero, esa misma realidad que hoy viven los periodistas de ese periódico guayaquileño, lo viven la totalidad de comunicadores sociales de los diferentes medios de comunicación privados y, vale reconocer, hasta de los mal llamados comunitarios que igual venden sus espacios enmarcados en las prácticas capitalistas.
¿Los medios de comunicación, son responsables de la vida de un pueblo? Tras más de 30 años inmerso en ellos, debo reconocer que sí, aunque ese no es su papel; como también reconozco mi corresponsabilidad, porque como todos los colegas siempre interpuse primero lo mío, la casa, la familia, antes que las realidades más globales como el de la comunidad en el que los medios influyen directa e indirectamente.
“A él, a éste o a estos otros no los topes”, son el pan de cada día, son las palabras que se suelen escuchar en las redacciones por parte de los jefes inmediatos como de área, redacción, directores y hasta de los propietarios. Ahí, la ética, la moral, las manuelas académicas, las enseñanzas de nuestros “iluminados maestros” no cabían. Incluso, en muchos casos, ni siquiera los eminentemente técnicos, porque la vos o directriz del superior está por encima de cualquier ley, norma o razonamiento lógico.
Pero, los que vivimos en el interior de esos cuarteles, perdón, de esas salas de redacción, sabemos que incluso va mucho más allá, porque su propietarios son capaces de denunciarnos a cabio de defender su sistema.
Cómo no recordar si luego de haber realizado una entrevista en la clandestinidad a un dirigente guerrillero e inmediatamente comentado al propietario del medio radial en el que trabajaba que tenía esa “exclusiva” y que estaba en camino hacia los estudios para su inmediata difusión, me tropecé con la ingrata realidad de que me esperaban un grupo de inteligencia militar y policial, para no sólo requisarme el material de la entrevista, sino para someterme al más “estricto” interrogatorio.
Pero también hay actitudes positivas en los medios y hay que reconocer, aunque podrían ser consideradas “raras excepciones”. Como usted amigo y amiga lector/a podrá reconocer, me identifico como un ciudadano de izquierda, simpatizante del trotskismo “por más señas”: Cuando fue asesinado un compañero militante y poeta, Marco Vinicio Poveda, la ira y frustración fue inmensa, por esa época laboraba en el Diario La Hora y decidí escribir una nota con relación a este hecho y con la máxima pasión que puede tener un ser humano que rechaza a este sistema lo hice con la anuencia y hasta solidaridad de la dirección periodística de este medio. Creo que fue la primera y única noticia-política-editorializada, que sobre el trotskismo se escribió en medio alguno.
Pocas veces fui censurado, pero la auto censura siempre fue la que me mantuvo vigente en el medio. Diario La Hora, casi nunca objetó mi trabajo y vale ser justo en este análisis, no así en otros, que por eso evito dar sus nombres.
Más allá de los impasses que el actual régimen tiene con este medio de comunicación escrito, guardo grades recuerdos y mucho aprecio para sus personeros; sin embargo, no dudo que vínculos comerciales personales y de grupos económicos y político han animado a ese periódico. ¡Qué decir de los demás!, como El Comercio, El Hoy, El Expreso, no se diga El Universo, por todos conocido, amén de otros medios televisivos, radiales y de online.
Los últimos acontecimientos registrados en el país nos convocan a todos, a la clase trabajadora en general y a los sectores políticos organizados, en particular, a crear focos centralizados de resistencia revolucionaria a nivel nacional, para frenar la arremetida brutal que se encuentra ejerciendo la clase dominante y en particular los medios fácticos, principalmente los comunicacionales privados.