LOS INDIGNADOS Y LA FURIA VERDE
Leonardo Ogaz Arce
En realidad una cadena de acciones y movilizaciones que va de Grecia a Túnez, Egipto y que se han prolongado en la Puerta del Sol en Madrid, nuevamente Grecia, Francia además de una formidable movilización ecológica en Santiago de Chile de más de 40.000 personas tienen en común un reclamo democrático profundo, representando un cálido y alentador viento de esperanza que recorre el mundo.
Queremos ver algo de la significación de lo ocurrido el 15 de mayo en la Puerta del Sol de Madrid y la movilización en Santiago contra la mega represas en el sur de Chile que pueden llegar a ser algo más que magnificas movilizaciones que cuestionan la corrupción, el desempleo y la crisis en el caso de España y la defensa del medio ambiente en el caso del proyecto de HidroAysen en Chile.
En efecto se aprecia una profunda tendencia que tiende a cuestionar seriamente tanto el sistema político, como al conjunto del sistema.
En el Estado español es evidente como la aguda crisis económica ha activado una crítica profunda al sistema político corrupto que ha hecho recaer la crisis en las espaldas de los habitantes del Estado español siguiendo las peores recetas neoliberales, que dificultan y entorpecen aún más la recuperación. Es por eso que el escrito de Stéphane Hessel cayó en un campo fértil y se transformó en el antecedente intelectual de las movilizaciones y sirvió para la denominación de los participantes.
En realidad la situación es como para morirse de las iras, cómo es posible que los banqueros irresponsables provoquen semejante crisis y hagan pagar las consecuencias a millones de personas siguiendo la injusta fórmula de apropiarse privadamente de los beneficios y socializar cuando hay pérdidas. Esta respuesta pacífica apunta a profundos cambios democráticos ya que la clase política española totalmente entregada a los dictados del F. M. I. al grado de cuestionar a fondo la soberanía del gobierno español. Pero también cuestiona un sistema que no tiene ninguna respuesta racional a la crisis que no sea volver a repetir el mismo ciclo que conducirá nuevamente a otra crisis.
Lo importante es que surge una salida a la Kafkiana situación de los ciudadanos españoles de votar por los socialistas (PSOE) que supuestamente son la izquierda para que estos ejecuten adocenadamente las políticas neoliberales de derecha y para protestar contra los terribles efectos de esas políticas lo único que tenían es a los propios neoliberales del Partido Popular o Partidos de la misma índole como el CIU en el caso de Cataluña.
Las cifras totales de las últimas elecciones municipales y autonómicas de España corroboran ampliamente lo que hemos señalado anteriormente, sumados las abstenciones, que fueron cerca de 12 millones de españoles, más los votos nulos y blancos tenemos que el 38.01% de los españoles rechazaron al conjunto del sistema político español. (Lo cual es más que la votación del Partido Popular)
El 15 M. Los indignados están en alguna medida rompiendo ese círculo infernal y planteando una salida distinta y alternativa, esto requiere un cambio decisivo en la reglas del juego político que sin duda en su desarrollo lleva a pensar en la lucha por una nueva constitución, es decir, la lucha por una Asamblea Constituyente.
Una situación parecida está ocurriendo en Chile, las dos coaliciones hegemónicas están siendo seriamente cuestionadas por la movilización ecologista que ha sido denominada como la furia verde, pero es una cuestión que va más allá de la problemática ambiental y apunta a cuestionar la ya degastada constitución pinochetista el sistema político binominal, cuestión que se ha visto confirmada con la última encuesta ADIMARK el populismo derechista de Piñera hace aguas, baja tanto la aceptación al presidente como la coalición opositora. Se abre, así, el espacio para la aparición de una tercera fuerza, pero no como una alternativa dentro del sistema sino en ruptura con el mismo, la gente ya no soporta el actual orden y lo empieza a visualizar como una trampa que ya se le vuelve insoportable. La lucha por una Asamblea Constituyente se hace cada vez más necesaria.
