El gobierno ha anunciado profusamente la reducción de la prima del riesgo país como un gran logro del Acuerdo de Servicio Ampliado (SAF) con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Sin embargo, ¿de qué sirve que baje el riesgo país si esto no se traduce en mejoras en las condiciones financieras de la deuda?
Primero, es preciso anotar que la reducción del riesgo país empieza a fines de diciembre 2018. Segundo, si el Ministerio pensaba que el Acuerdo de Servicio Ampliado con el Fondo que se firmó en marzo 2019 podría reducir el riesgo país, ¿qué sentido tenía hacer una colocación de Bonos antes de firmar el Acuerdo?
En enero 2019, el gobierno realizó una emisión de bonos a una tasa del 10.75%, que si se hubiese colocado ahora al 9,85% habría representado una disminución en el pago de intereses de 90 puntos, con lo cual la adelantada colocación de los bonos implicó un pago anual en exceso de por lo menos 9 millones de dólares.
¿Quién compró esos bonos? ¿A quién beneficiaron con esa operación?
El 10 de junio de 2019, con el SAF ya firmado, acaban de realizar una operación de recompra de los Bonos 2015-2020.
Cabe recordar que en el 2015 se realizaron dos emisiones de Bonos que vencen en 2020, es decir, aquellos Bonos cuyo capital hay que pagar el próximo año. Una por US$ 750 millones a un cupón de 10.5%[1] y otra por el mismo valor con cupón de 8.5%[2].
El ministro de Finanzas, Richard Martínez, dijo que la operación de recompra de estos Bonos 2015-2020, fue exitosa porque:
- El monto de la deuda disminuyó.
- El riesgo país bajó 18 puntos el día de la operación.
- La tasa de interés bajó de 10.75% a menos de un dígito, a 9.85%.
- Se recompró las 3/4 de la emisión, cuando otros países no sobrepasan el 50% en operaciones de recompra.
Si se realiza un análisis punto por punto de las supuestas ventajas, se encuentra lo siguiente:
- La reducción del monto de la deuda fue de $50.4 millones, en bonos que cotizan por encima del 100% de su valor nominal y este valor es mínimo comparado con lo que se está pagando en exceso por los Bonos emitidos en enero.
Lo que han hecho es patear el resto del pago de capital al 2029, es decir, los $1,125 millones, mientras que en el próximo año se tendrá que pagar $324,6 millones de capital que no se recompraron.
- Si el riesgo país disminuye se supone que es para reducir el interés de la deuda y esto no pasó. Si se comparan las condiciones de cada Bono y el riesgo país de esa fecha, la diferencia fue mucho más alta en esta operación del 2019, cuatro puntos más, cuando en las operaciones del 2015 la diferencia fue de entre 1,9 y dos puntos:
- La tasa promedio de los Bonos 2020 era del 9.5%, ahora es 9.85% con un riesgo país más bajo.
- El porcentaje de recompra fue mayor al de otros países porque a los Bonos de mayo 2015 les dan más interés que antes, por tanto, ¿cómo no van a recomprar? Además, el pago de intereses o servicio de la deuda será hasta el 2029.
Es una operación engañosa y perjudicial, no exitosa y la carta con el Fondo es una suerte de garantía para los compradores de Bonos, que según el gobierno reduce el riesgo país pero esto no se traduce en mejora de las condiciones financieras.
Al mismo tiempo esta operación es una muestra más de la falta de rumbo de la política económica que tiene como claros beneficiados a los tenedores de Bonos.
El 17 de junio de 2019, el Banco Central del Ecuador disminuyó la proyección de crecimiento para este año 2019 del 1,4% al 0,2%. ¿Dónde queda la prosperidad, el optimismo y los supuestos logros que iban a traer el Acuerdo con el Fondo? En nada.
*Es una mujer ecuatoriana de izquierda. Fue Ministra Coordinadora de la Política Económica de Ecuador entre abril 2010 y octubre 2011. Se desempeñó como profesora investigadora asociada y coordinadora del Centro de Investigaciones económicas y de la pequeña y mediana empresa (CIEPYMES) en FLACSO Ecuador, y es actualmente Docente de la Universidad Central.
[1] https://bit.ly/2YdafDY
[2] https://bit.ly/2YeRJvc