Cuando llegaron los conquistadores españoles al continente americano, murieron millones de indígenas, sobre todo, por enfermedades como la viruela, el sarampión y la influenza que se esparcieron rápidamente ante la falta de atención adecuada y las condiciones socioeconómicas de los pobladores. Hoy en día vivimos la epidemia de la covid-19 y, pese a que estamos en el siglo XXI, los paralelos con el pasado son preocupantes.
¿Qué justifica la desvalorización de los adultos mayores vista en los meses de pandemia, tanto a nivel mundial como en nuestras inmediaciones? ¿Bajo qué argumentos los gobiernos, las empresas y el mercado han discriminado a las personas de la tercera edad?
Desde el siglo XV en adelante, los europeos aniquilaron miles de poblaciones después de su invasión a América. En algunos territorios exterminaron comunidades enteras con trabajos forzados de hombres, mujeres y niños indígenas. La modernidad capitalista nacía con la esclavitud.
La pésima gestión epidemiológica y la falta de ética, caracterizan nuestra realidad pandémica, epidémica y endémica. Lideramos casos de muertos e infectados por habitantes y sin embargo el centro de la crisis pasa de la rapacidad política a la podredumbre moral.
La muerte de George Floyd es un nuevo detonante de la ira popular en los Estados Unidos de Norteamérica. La asfixia provocada por el policía expresa la desproporcionada violencia con la que actúan las fuerzas coercitivas estatales y su carácter fascista, pues históricamente la brutalidad de la gendarmería está agravada el por odio racial.
La centralidad de Europa y EE.UU. suman casi dos siglos. Desde el año 2018, EE.UU y China entraron en Guerra Comercial y en el año pandémico, 2020, China corona la hegemonía económica mundial.
Estamos ante una sociedad anómica, raquítica, desinstitucionalizada y violentada, atrapada entre el miedo a una pandemia y el terror creciente a un mañana de hambre, pobreza y miseria.
Detrás del sector de la salud hay negocios gigantescos. La mercantilización de la medicina es una de las principales fuentes de ingresos corporativos a nivel mundial. En otras palabras, es uno de los pilares del capitalismo.
Hemos pasado de una época en la que se intentó transformar a los funcionarios estatales en militantes del partido de gobierno, a otra caracterizada por el desprecio de los ciudadanos –exteriorizado en redes sociales con insultos y generalidades canallescas– que los asocia como los únicos causantes del descalabro económico de la república.
El sistema alimentario de las ciudades, así como de producción agrícola industrial con sus intermediarios, está obsoleto. El futuro viene de la mano de la agroecología, la venta directa y el trueque.
A pocos minutos del informe presidencial del 24 de Mayo, las élites, encerradas en algún sauna de la Cámara de Comercio, decidieron que el Lerdín ya no daba más, que era necesario un cuasi Presidente, que, aunque enano, dé la talla. Y ahí nomás se encargaron de redactar el decreto que le da más poderes al ex rupturita, Roldín.