El Movimiento Montecristi Vive cuestiona la intención del Consejo Nacional Electoral de descalificar al Movimiento Ruptura 25 (R-25) y al Movimiento Popular Democrático (MPD) basado en argumentos que no solo contradicen la norma constitucional, sino que atentan contra el principio democrático de la participación política más amplia y diversa. En un afán legalista y tecnocrático digno de mejores causas, atropellando el marco jurídico, el CNE se aprovecha de la ambigüedad de ciertas normas electorales para deshacerse de las organizaciones políticas que no se alinean con las decisiones y orientaciones emanadas desde el Gobierno.
Una vez más, Montecristi Vive considera indispensable la existencia de un CNE imparcial e independiente, que restablezca la confianza perdida definitivamente luego del condenable papel cumplido frente a la consulta popular solicitada por el Movimiento Yasunidos.
No es aceptable que el Ecuador carezca de una Función Electoral que le ofrezca a la ciudadanía la plena seguridad sobre sus actos y responsabilidades. Restringir la participación electoral de fuerzas que expresan la diversidad político-ideológica del país constituye un irreparable golpe a la democracia.
Por esas razones, Montecristi Vive considera que la sociedad debería impulsar un proceso para renovar el actual CNE, cuyos miembros se han convertido en una amenaza para la vida democrática del país.
Quito, 18 de julio de 2014.
Juan Cuvi
COORDINADOR DE MONTECRISTI VIVE