16 junio 2014
Los tiros de esquina siempre se asemejaron a la más alta reflexión existencialista. Un sujeto desde el rincón se apresta a disparar una opción de gloria para unos y de tristeza para otros. Los tiros penales se parecen más al mundano espacio del sistema jurídico, un fusilero y un hombre en el paredón. Pero toda cancha es vida y amor, el gol es el orgasmo del fútbol que lo aproxima al lado más hedónico de la vida. “El árbitro es el abominable tirano que ejerce su dictadura sin oposición posible y el ampuloso verdugo que ejecuta su poder absoluto … Coartada de todos los errores, explicación de todas las desgracias. Porque El fútbol se parece a Dios en la devoción que le tienen muchos creyentes y en la desconfianza que le tienen muchos intelectuales.” (Galeano)
Los pueblos han hecho de futbol una manera de guerrear en paz (aunque los mercachifles han hecho sus negocios en el templo y los poderes su contexto de guerra contra el pueblo (Brasil), el Futbol y sus anécdotas nacionales y mundiales siempre son una pedagogía fraterna y risueña. Los ecuatorianos rememoramos ese anecdótico al empate Calceta cuando ya hasta la esperanza está perdida, pero no la confianza…y es que Deportivo Calceta perdía 9 a o con Barcelona y al fin metió un gol, por lo que un campesino manabita se levantó en las graderías y grito eufórico y fatal al empate calceta
La desconfianza anarquista se extiende a la cancha y un futbolista dice “¿los árbitros? unos perjudican y otros también”. La dignidad le hace decir a otro futbolista después de perder 9-0 “Prefiero perder un partido por 9 goles, que nueve partidos por un gol”.
El futbol hace que el hombre sea niño y el niño se sienta hombre y en los hombros. Vuelve el futbolista pillo a robar una bola gambeteando a todo el mundo y al juez y manda a la mierda el libreto del técnico y la tecnocracia. Otro acto libertario. El jugador llega a la gloria, el barrio lo aclama, se la saco a la fábrica, a la oficina, a la milicia o la lumpería, le pagan por divertirse, las mujeres suspiran por él, lo feo o lo lindo acortan distancias
HECHOS CURIOSOS Y DIVERTIDOS DEL FUTBOL.
En Guayaquil en los años 70 jugando por el Barcelona, un rebote sorprende al arquero Macías quien corre de frente al arco e intentando salvar el gol saca de chilena el balón y se queda prendido de la malla gritando que lo auxilien. En otro partido un defensor agarra de la camiseta a un jugador y le rompe, el árbitro no pita la infracción ni siquiera cuando el futbolista le enseña la evidencia en las manos ¡así son los jueces ¡
En 1975 se enfrentaron en el St. Mel’s Park el local, Athlone Town, y St. Patrick’s Athletic por la liga de Irlanda, el arquero O’Brien, famoso por sus payasadas, estaba tan aburrido porque no atacaban los rivales que empezó a distraerse sentado sobre la red… de repente se escuchó un ruido. Cuentan que en aquellos días el arco de madera se vino abajo por hamacarse colgado del travesaño. El árbitro expulsó al guardameta aunque la tipificación del delito no existía ¡vaya árbitros¡
En otra ocasión hinchas y dirigentes de Leeds United se quedaron más que boquiabiertos cuando Liverpool anotó un gol contra su equipo y el árbitro Mike Reed hizo un gesto con un brazo festejando la conquista. El juez insistió que no festejó el gol de Berger, sino su propio acierto al cobrar una ley de ventaja en la jugada del tanto. “A un árbitro le encanta cuando se anota un gol en una jugada en la que sancionó ley de ventaja”, dijo…Cualquier parecido con otros jueces es pura coincidencia.
1973 había un muchacho que prometía ser un fenómeno. ¿Cómo se llama el pibe…, “Pasarela” ese apellido nunca puede ser futbolista!, sentenciaron. Pero Pasarela se hizo gran futbolista y mejor ser humano cuando se negó a festejar el campeonato mundial con la dictadura Argentina y el pueblo aplaudió al grito Pasarela Pasarela el triunfo no es de Videla
La gracia nunca está ausente del futbol luego de un partido en el cual se había mostrado infatigable, el relator José María Muñoz le preguntó a Reinaldo Merlo: “Mostaza, ¿cuántos pulmones tiene?”, a lo que respondió: “Uno Muñoz, como todo el mundo”.
O como lo relata Baraza, en una ocasión el entrenador le gritaba a un futbolista humilde del Perú juga mas con ahincó y al terminar el partido le incrimina porque no jugaste con ahincó a lo que el futbolista responde es que no sé quién era ese ahincó y Ricardo Vasconcelos que relata sobre aquel futbolista que en el último minuto salvo a su equipo de la derrota cuando saltó de la banca y rechazó un gol de la raya, lo que comprometió el resultado y puso en riesgo su integridad…una anarquista total y un atleta que supo correr por su vida
También nos cuenta Galeano una anécdota entre el Aucas y la Liga a principios de los años sesenta cuando antes del partido se anuncia un minuto de silencio por la muerte reciente de la madre del árbitro… El público guardó respetuoso silencio, pero cuando anuló el gol del Aucas el grito unánime de la hinchada fue ¡huérfano hijueputa, huérfano hijueputa¡¡¡Los jueces y el pueblo tienen su limites.
Los comentaristas también son parte de las anécdotas. A Vito Muñoz le ocurrió en una copa América queriendo entrevistar a Menotti con dificultad, y Menotti le abrió paso diciendo déjalo pasar si es mi amigo Víctor Muñoz de la Televisión peruana o a Bonafont que le preguntaba en un avión a un entrenador argentino que leía, que lees a Borges, Sartre o Camus, y el argentino le responde no no no, es el grafico Che.
Nuestro pueblo cuando ya no tienen más explicación las cosas dice; ASI ES EL FUTBOL